domingo, 30 de octubre de 2016

Coopera MOOC: agrupa al alumnado

Coopera MOOC: agrupa al alumnado

En mi centro, hace tres años que apostamos por hacer una formación en aprendizaje cooperativo. Y la primera tarea a la que tuvimos que enfrentarnos fue la de los agrupamientos. Es una tarea complicada, ya que siempre hay pegas, y nunca te parece que queda perfecta. Siempre tienes la duda si podría resultar mejor de otra manera. Nunca encajan bien TODAS las piezas del puzzle, no es una pregunta con respuesta correcta...
By lumaxart - Working Together Teamwork Puzzle Concept, CC BY-SA 2.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=3590887

¿Homogéneos o heterogéneos?

Nuestro centro apuesta por la inclusión. Los apoyos siempre se hacen dentro del aula, por lo que hacer grupos homogéneos no era una opción. Apostamos decididamente por los grupos heterogéneos. Esto no significa que puntualmente se pueda organizar PUNTUALMENTE una actividad en grupos homógenos,  pero la dinámica de la clase viene dada por los grupos heterogéneos.

Así que de repente, me encuentro con una clase de 1º de Educación Primria en la que los alumnos no se conocen mucho uno a otros y apenas tienen 6 años. Son alumnos muy pequeños en los que el desempeño académico y la actitud cooperativa no son están muy maduradas. Sin embargo, contamos con una ventaja: sabemos que infantil han comenzado a hacer sus pinitos en aprendizaje cooperativo, y que además, en clase, siempre se distribuyen en grupos de 4 o 5 para participar en rincones, centros o "txokos". Para ellos es natural estar en grupos pequeños. De hecho, yo creo que les aterraría estar separados individualmente en filas...

En esta edad, las diferencias también son muy grandes: algunos son capaces de leer y comienzan una incipiente escritura, mientras que otros aún siguen muy perdidos con todo el tema de la lectoescritura. Si hiciéramos grupos homogéneos, probablemente fomentaríamos que esas diferencias se sigan agrandando en el tiempo. El grupo más avanzado progresaría más rápidamente, o incluso se aburriría y los grupos que estuvieran aún "en proceso" puede que se estancaran.  Así que insisto, mis grupos son y serán heterogéneos.

Para configurar cada grupo, pensamos en los alumnos que necesitan más ayuda y en los que son capaces de dar ayuda: centrar en la tarea, aclarar dudas, clarificar los pasos que hay que dar en cada momento...Como he dicho antes, los alumnos son muy pequeños, y un buen desempeño académico no significa que estén dispuestos a ayudar. Aún son un poco egocéntricos (es totalmente normal) y su mundo acaba y empieza en ellos. Otros alumnos con un desempeño académico menos brillante, tienen más empatía y son más capaces de ayudar. Y eso es lo que hemos tenido en cuenta para agruparlos.

También hemos procurado poner en los grupos más cercanos a la pizarra (y al profesor) a los alumnos que necesitan más ayuda. Así, para el profesor es más fácil acercarse e intervenir: no para ayudar a los que necesitan la ayuda, sino para modelar en los compañeros que ayudan cómo trabajar con estos compañeros. Y bueno, la gran sorpresa es, que a veces no necesitan ni ese modelaje por parte del profesor, sino que intuitivamente son capaces de ayudar a los compañeros mejor que nosotros mismos.




Tamaño ideal de los agrupamientos

Este curso he tenido la oportunidad de hacer apoyos en un aula en la que hay 24 alumnos. El alumnado está agrupado en grupos de 4, con lo que hay un total de un grupo de 6. La verdad que he visto claramente cómo los grupos de 4 son mucho más operativos que los de 5 o 3, y desplazarse por la clase para ver como están llevando a cabo las actividades de aprendizaje cooperativo resulta muy sencillo. Además, cada grupo dispone de su estantería en la que guardar los libros del equipo, el cuaderno de equipo y sólo uno de ellos tiene la responsabilidad de encargarse de repartir el material.

Ése sería el ideal...pero rara vez la realidad cuadra con "lo ideal"; las ratios por aula no son de 24, sino de 25 (este año en Navarra la han vuelto a dejar en 25). Sin embargo, venimos arrastrando aquella subida de ratios a 27, y en mi clase somos esa cifra. El año pasado eramos 26, repartidos en 4 grupos de 4 y dos de 5. Este año somos 27  y hemos repartido a los alumnos en 3 grupos de 5 y 3 grupos de 4. Tanto mi compañera como yo (trabajamos en el mismo grupo tutor/cotutor de castellano/inglés) nos hemos dado cuenta de que 3 grupos de 5 es demasiado, y además, el quinto integrante del grupo queda un poco aislado, resulta difícil su integración en las actividades. Quizá una mesa redonda para 5 alumnos mejoraría la situación, pero no disponemos de ellas... Nos estábamos planteando hacer un grupo más de 3 (quedarían 6 grupos de 4 y uno de 3) pero el aula es pequeña y no sabemos bien dónde encajarlo. He visto las tareas de algunos compañeros y voy a proponer a mi compañera colocar los grupos de 5 de otra manera, para ver si conseguimos una mejora en la integración del 5º miembro. ¡Gracias compañer@s!

Nueva idea para un grupo de 5: la probaremos


Duración: trimestre

Como he dicho antes, mis alumnos el curso pasado apenas se conocían. Pasar un trimestre en grupo les ayudó a conocerse mejor, les dio el tiempo suficiente para ello. La clase en general mejoró en cohesión a su vez. Además, nos dimos cuenta de que hay que cambiarlos cada trimestre. Es una necesidad real para ellos: a veces hay compañeros más impulsivos o independientes con los que es difícil trabajar. Incluso a nosotros los adultos, nos pasa que se nos hace difícil trabajar según con qué persona. No les podemos pedir a ellos, que disponen de muchas menos estrategias y madurez que lo hagan mejor incluso que nosotros. Por eso es bueno cambiar al trimestre, así aligeramos el ambiente en aquellos grupos que han tenido que tener más mano izquierda con alguno de sus miembros.

Croquis de mi clase





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